Es evidente que según la música que elijas para relajarte dependerá fundamentalmente de tu personalidad. La música clásica está considera como la de mayor potencial de relajación, ya que conlleva a un estado de tranquilidad mental que induce al sueño e incrementa el tiempo de descanso al tiempo que mejora el rendimiento al día siguiente, incluso se ha dicho que podría tener un efecto acumulativo en el sueño y por tanto mejorar la calidad de descanso con el paso del tiempo.
La música se ha utilizado dese hace siglos para obtener cambios de conducta, tanto físicos como emocionales, a cualquier edad, como terapia para control de la ansiedad y del estrés y por consiguiente conseguir un estado emocional más relajado. La música clásica, con ritmos tranquilos induce a un estado de calma disminuyendo la frecuencia cardiaca, la frecuencia respiratoria, es decir
estamos a un nivel cercano al que se produce durante el sueño.
Escuchar música, además de servir para la relajación e inducción del sueño, puede tratar patologías diversas tanto en el terreno social, emocional o intelectual, así mismo puede ayudar a mejorar el aprendizaje, la creatividad, y por supuesto el estrés. Además en los niños puede potenciar la concentración, la atención y la autoestima.
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